La histórica confitería pasa a estar en manos del Congreso de la Nación y es deber de la Comisión Bicameral recuperar el Monumento Histórico con más de cien años de antigüedad que permanece cerrado desde 1997.
La visita fue un fascinante recorrido a la historia de este exponente del Art Noveau, caracterizado por sus ricos ornamentos donde las anteriores generaciones porteñas pudieron disfrutar a través de diferentes experiencias.